Coevolución: qué es y cómo funciona
La coevolución se define como el fenómeno en el cual dos o más especies interactúan entre sí de manera continua, influyéndose mutuamente en su proceso evolutivo. Se trata de una relación estrecha y simbiótica que puede ser beneficiosa, perjudicial o neutra para las especies implicadas.
El concepto de coevolución se basa en la idea de que las especies no evolucionan de manera aislada; éstas se adaptan y cambian gracias a la presión selectiva que ejercen otras especies con las que comparten hábitat. Por ello, las interacciones entre plantas y sus polinizadores, depredadores y presas son ejemplos claros de coevolución.
En estos procesos coevolutivos, si una especie cambia, la otra también lo hace para adaptarse al cambio, dando lugar a una retroalimentación evolutiva. En algunos casos, esta adaptación puede ser tan fuerte que puede dar lugar a la especialización de ciertas especies que evolucionan en conjunto, creando una relación simbiótica más compleja.
Ejemplos de Coevolución
1. Las orquídeas y sus polinizadores, que se han adaptado mutuamente para garantizar la polinización exitosa.
2. Las mariposas monarca y las plantas de la familia Asclepias, que poseen defensas químicas contra los herbívoros y que las mariposas han creado resistencia a través del tiempo.
3. Las jirafas y los árboles de la sabana africana, que se han adaptado para que las jirafas puedan alimentarse de las hojas y ramas altas sin destruir los árboles.
4. Los tiburones y los delfines, que han desarrollado sentidos extremadamente agudos para detectar y cazar a sus presas.
5. Las plantas carnívoras y sus presas, que se han adaptado para que las plantas puedan atrapar y digerir eficientemente a sus presas, y las presas para evitar su captura.
6. Los parásitos y sus huéspedes, que se han adaptado para que los parásitos puedan sobrevivir en sus huéspedes sin matarlos.
Sinónimos de Coevolución
Adaptación mutua, retroalimentación evolutiva, simbiosis evolutiva, interacción evolutiva.