Ciclo de Calvin: el proceso de fijación de carbono en las plantas
El ciclo de Calvin es un proceso biológico fundamental que ocurre en los estomas de las células vegetales, y que permite la fijación de carbono por parte de las plantas. Este proceso notorio por llevar al dióxido de carbono (CO2), transformándolo en compuestos orgánicos y liberando oxígeno al ambiente.
Durante el ciclo se lleva a cabo una serie de reacciones bioquímicas y enzimáticas altamente especializadas, que transforman el dióxido de carbono y la energía luminosa absorbida por la clorofila en ATP y NADPH, dos compuestos energéticos fundamentales que permiten la síntesis de glucosa.
Una vez formados estos compuestos, la célula procede a utilizarlos para la síntesis de azúcares, amido y otros carbohidratos. Esto, a su vez, permite a la planta almacenar energía y reservas de nutrientes esenciales para su crecimiento y desarrollo.
Ejemplos de Ciclo de Calvin:
1. Las plantas de trigo utilizan el ciclo de Calvin durante la fotosíntesis para convertir el dióxido de carbono en glucosa.
2. El ciclo de Calvin también está presente en las algas, permitiéndoles obtener energía a partir del sol.
3. El proceso del ciclo de Calvin permite la fijación de carbono en los tejidos de las hojas, ramas y tallos de los árboles.
4. Las plantas de tomate utilizan el ciclo de Calvin durante la fotosíntesis para producir sus frutos y semillas.
5. El ciclo de Calvin es responsable de la oxigenación de nuestra atmósfera, gracias a la producción de oxígeno durante la fotosíntesis.
6. La inhibición del ciclo de Calvin puede tener graves consecuencias para el crecimiento y desarrollo de las plantas.
Sinónimos de Ciclo de Calvin:
– Ciclo de fijación de carbono
– Ciclo de reducción-carboxilación
– Vía fosfoglicolítica oxidativa inversa
– Crossover de Benson-Calvin
– Ciclo de reducción de carbono
– Fotosíntesis reducida de carbono.